viernes, 22 de abril de 2011

ENTREVISTA A HEMIL GARCIA CON LA PERIODISTA LORENA RIVAS PARA BLOG DEL DIARIO EL PAIS

Cuentos del Norte, Historias del Sur, la charla con Hemil García.Escrito por: lorena-rivas74 el 13 Mar 2011 - URL Permanente

Entrevista

Por Lorena Rivas.

¿Qué hace que una persona se mude a otro país? Y ya en esa otra tierra, sea cual fuere su nombre ¿cómo hace esa persona para escribir?

Hemil García Linares, es un periodista peruano que hace once años partió a los EEUU para cambiar de aire. Allí, resurgió en él su amor por la literatura y acabó escribiendo "Cuentos del Norte, Historias del Sur". Este libro, publicado en 2009,es actualmente, material de referencia para alumnos universitarios que cursan la cátedra de castellano.

Antologado en México, Argentina y EEUU; Hemil García Linares cuenta con el beneplácito de Oswaldo Reynoso, entre otros escritores. Por otro lado, su obra debut resultó premiada en 2010, en los "International Latino Book Awards " (Nueva York)

Para quienes quieran leerlo, pueden conseguir sus cuentos/historias en la librería amazon, pero si prefieren una copia autografiada, pueden escribirle a su mail hemilgl@verizon.net

Un dato curioso: ¡Hemil García es un converso fanático del Racing Club de Avellaneda! Sé que los lectores argentinos de este blog, comprenderán la dimensión poética de este hecho.

Aquí va la nota.

Pregunta: Al mencionarle a un escritor con marcada devoción literaria como la tuya, el nombre "Virginia", lo primero que se le vendría a la cabeza es la Woolf. Pero en tu caso, este nombre también te remite a tu lugar de residencia. ¿Por qué Virginia para vivir y escribir?
Respuesta:Vine a Virginia porque tenía familia (debería decir tengo pero no nos vemos hace un año) lo cual facilitó el adaptarme al modus vivendi de Estados Unidos: el orden en las calles, polución reducida, y también un individualismo extremo. Te cito un ejemplo. Vivo desde el 2006 en la ciudad de Centreville y en mi calle conozco apenas a cuatro o cinco personas pero solamente coincidimos cuando tenemos que remover la nieve o por las mañanas antes de encender el auto. Mas allá de un buenos días y hablar trivialidades sobre el clima, la comunicación es, digamos, cordial pero no cálida.
La soledad, silencio y el anonimato del suburbio hace que un viernes por la noche pueda escribir en silencio acompañado de una cerveza o algo de vino y pensar, recordar el sur y también mis vivencias en el norte del continente.
En Washington DC, Virginia y Maryland se realizan lecturas y eventos literarios lo cual me hace más llevadera la vida aquí pues son estados colindantes de la zona este del país.


P: Todos los que inmigramos lo hacemos por una razón de hambre, ya sea de barriga, ya sea intelectual. Si se me permite la indiscreción, preguntaré ¿cuál era tu "hambre"? ¿Pensabas que lo saciarías en EEUU o sólo te fuiste allí por ser la opción inmigratoria más viable?
R: Siempre tuve desde pequeño las ganas de viajar y recorrer un poco el mundo. En Lima a veces sentía que no encajaba. No tenía ese silencio necesario para escribir. Como todo país en desarrollo Perú en los 90’s no ofrecía un buen panorama para muchos jóvenes. La dictadura de Fujimori y una economía no muy prometedora (en ese tiempo) me hizo pensar que debía viajar, explorar y encontrar un lugar donde encajar y donde poder estar más tranquilo y así enfocarme en escribir. No tenía la certeza que en Virginia encontraría lo que buscaba pero igual me vine. Quiero aclarar que adoro Lima y Perú. Sin embargo había algo en mí que me empujaba a viajar. Desde los catorce años he viajado(a veces solo) por la sierra de Lima y también a Cuzco (Machu Picchu).
En todo caso parafraseándote tenia “hambre “de viajar y conocer. Aquí en Estados unidos he conocido la casa de Mark Twain en Connecticut y pronto iré a ver el Museo de Edgard Allan Poe. Aquí en Virginia están los barcos en los cuales llegaron los primeros ingleses y también Jamestown la primera colonia donde vivieron los Powhatan. De hecho has oído hablar de Pocahontas.
En Washington DC hay unos museos impresionantes y la arquitectura es también interesante.


P: En EEUU hiciste labores varias pero finalmente trabajaste de lo tuyo, aquello que te da identidad: el periodismo y la literatura ¿Cómo fue ese proceso de transición entre el trabajo de leñador al de escritor cuya obra es leída y reconocida en la Universidad?
R: En Sudamérica tenemos la tendencia de minimizar el trabajo de los obreros y oficios técnicos. Sobre esto escribió alguna vez José Carlos Mariátegui en sus Siete Ensayos de la Realidad Peruana. Tenemos (lamentablemente) mentalidad colonial y retrógrada. En Estados Unidos no se mira a la persona por el titulo o su apellido, sino por lo que puedes hacer. Al respecto decía Benjamín Franklyn en su ensayo Para Aquellos Que Quieran Venir a América que en Estados Unidos no se valora a quien desea vivir de títulos nobiliarios o cargos públicos.
Para mí fue una experiencia muy rica ser leñador pues no solo aprendí un oficio que me puso en un estado físico envidiable y trabajé con gente de campo (country people) y también con latinos de zona rurales de México y Centroamérica que no tuvieron la suerte de ir a la escuela y aprender a escribir. Y yo que jamás en mi vida había hecho trabajo físico aprendí a manejar moto sierras y usar hachas. Lo más importante: aprendí que vivir de títulos o creer que tu profesión es parte de su persona en un ridículo. Cuando estuve trabajando en un escritorio frente a una computadora más de una vez extrañe estar en estar cortando arboles con gente tan sencilla y franca que no tiene esos complejos que a veces tenemos las personas de ciudad y más aun los capitalinos. Ahora que te cuento esto recuerdo que John Steinbeck, ganador del Nobel de literatura en 1962 trabajó en ranchos y granjas. A veces me decía si un genio como Steinbeck trabajo en granjas, ¿Por qué un estudiante de literatura como yo no puede ser leñador (risas)?
Te confieso que a mi ser leñador me dio tanta o más identidad que ser periodista pues me ayudo a encontrarme como ser humano, estar del otro lado, sentir lo que siente la gente que se parte el lomo trabajando diez horas en la lluvia con temperaturas gélidas o infernales y posteriormente estas experiencias me dieron mucho tema para escribir.


P: Los “Cuentos del norte, historias del sur” ¿Cuánto tienen de invención pura y cuánto de inspiración en historias reales?
R:La ficción y la realidad siempre están entrelazadas .Un lectora me preguntó si yo me había enamorado así obsesivamente como una de mis personajes que incluso piensa en llegar a cualquier extremo por poseer a una mujer y no tener un rival que estorbe. Yo le contesté que ya hubiese querido tener esa obsesión. Sin embargo el cuento era pura invención mía basada en el Túnel de Ernesto Sábato (tu compatriota). Era como un ejercicio y una manera de decir: Don Ernesto, jamás en mi vida podré escribir como usted pero este cuento es mi modo de decir lo mucho que lo admiro y quiero. Gracias a el Túnel me animé a escribir mi primer cuento “publicable” que es Ana y el Sol.
Algunas de las historias pueden haber ocurrido pero pueden tener el género cambiado. Es decir le ocurrió a un hombre y no a una mujer, y esa mujer no era de Guatemala, sino de México. Un escritor puede transformar cierta realidad en ficción y viceversa.
Algunas historias puede que me hayan ocurrido a mi o creo que me han ocurrido o quizás las he soñado o visto en pesadillas.

P: ¿En qué momento de tu vida concebiste estas historias, a qué hora las escribías y cuánto tiempo te llevó este Libro?
R:Ana y El Sol que es un cuento representativo de mi libro Cuentos del Norte, Historias del Sur lo escribí fumaba un cigarrillo mientras mi novia de toda la vida estaba dormida. Me sentí “solo” y en la oscuridad empecé a escribir esa historia. No había ninguna luz, lámpara ni velas (en los 90’s en Perú debido a los ataques terroristas a veces no teníamos luz)
Los demás cuentos los he escrito entre el 2003 y 2008 en Estados Unidos. En ciudades como Manassas, Centreville y en la playa: en Virginia Beach y Ocean City.
Soy un midnight writer o escritor de medianoche. Este libro lo escribí cada viernes desde la media noche hasta las cuatro de la mañana.


P: Lo que inquieta a todos los noveles... la publicación ¿Cómo llegaste a publicar "Cuentos del norte, historias del sur?
R: Primero: publicar no debería inquietar a los jóvenes, sino tener, digamos, diez cuentos o un libro completo editado y corregido. Lo demás viene con el tiempo.
¿Cómo publiqué? Mandé mi trabajo a muchas editoriales peruanas y argentinas. Algunas editoriales me contestaron y poco a poco empezó el proceso de publicación que es a largo y tedioso.
Inquietarse por publicar puede ser un arma de doble filo. Un libro mal escrito no es una buena manera de comenzar y puede ser contraproducente. Al buscar un editor en el futuro, mostrar ese primer trabajo puede que no sea una gran carta de presentación. Con ello no digo que mi libro sea un gran libro pero tengo la que certeza que he trabajado arduamente en elaborar el concepto y hay mucha honestidad en el mismo.

P: ¿Y ahora se viene la novela?
R: Sí. Pienso publicar en Argentina o Perú pues ha habido algunas propuestas interesantes pero no he decidido la editorial. Lo novela tiene el auspicio del Gobierno Español a través de su embajada en Washington. Una editorial Española también me hubiese encantado. Tuve un contacto con una editorial independiente de Madrid pero no se concretó nada.


P: Creo que ciertos agentes literarios y algunas editoriales han perdido
un poco de credibilidad en los últimos años ¿cómo ves a tu obra dentro de este panorama general del "comercio" literario?
R: Te digo honestamente. A mí me queda poco tiempo para fijarme en los que hacen los demás. Si la editorial o los agentes perdieron su credibilidad me es indiferente. Cada quien puede manejar su editorial como mejor le plazca. Después de todo un editorial es una empresa como cualquier otra y un libro es un producto. Todo aquello que tiene un código de barras y un precio es un producto. Es muy romántico creer los libros son sólo arte. En vez de preocuparme por los problemas editoriales me centro en mis propias complicaciones “existenciales”: mi libro Cuentos del Norte pese a ganar un concurso internacional en New York no ha sido publicado en Estados Unidos. Yo rechacé una oferta que, en su momento, no me satisfizo. Después al escribirle al editor para conversar el respecto jamás me contestó. En todos lados ocurren estas cosas pero no por ello despotrico contra el editor.
Mi otro “problema” mediato es tratar de publicar la novela el 2011. Al menos una vez al año planeo asistir a una conferencia y eventualmente presentarme con mi libro en alguna universidad. La Universidad VCU de Richmond me invitó a finales de marzo del 2011 a presentar mi libro y hablar con los alumnos sobre inmigración y literatura.
Cuando hay tiempo libre escribo y escribo: a veces mientras almuerzo, a veces mientras mi esposa maneja el auto.
A ellos le sumo que tengo que trabajar (de algo hay que vivir) y por sobre todo pasar tiempo con mi esposa y mi hija.
¿Qué tiempo puede quedar para dedicárselo a los editores y las editoriales?

P: Por lo que sé, eras muy dado al reparto de "piñas". En el mundo literario, hoy ¿a quién le darías una buena zurra? Simbólicamente hablando, claro está. (Para el lector español: la piña en América, además de una fruta, es una "trompada”)
R: Veo que has leído sobre mi (risas). En la escuela era muy terrible y también cuando jugaba al futbol ¿“piñas”? ¿Hoy?, A nadie. Existen géneros literarios como las historias de vampiros, fantasía, y twiling zone que están muy de moda. Particularmente no me gustan y simplemente no las leo. “dejar hacer, dejar pasar”. Cada quien puede escribir lo que le venga en gana.


P: Te propongo sumarte a un nuevo movimiento literario cuyos escritores cumplan con las siguientes características: ser latinoamericano e inmigrante, tener como uno de los temas de su obra la inmigración, haber llegado a publicar gracias a saber “dar piñas” a las dificultades, haber sido publicado o premiado fuera de su país, y por último, ser solidario/a. ¿Te adscribes?
R: He escrito justamente un artículo sobre inmigración y literatura que está en sintonía con lo que propones: hacer literatura de inmigración con autores de varios países y así poder mostrar a lectores de latinos del mundo cuentos de escritores inmigrantes de Estados Unidos, Europa y Japón, por citar algunos países. Cuenta conmigo.
Sin embargo creo que podría hacerse espacio para escritores noveles también aunque no hayan publicado, pues si entre los autores no nos apoyamos entonces, ¿quién lo va a hacer? Aquellos que han publicado tienen la “obligación” de transmitir a los jóvenes los que han aprendido, sobre todos de sus tropiezos.

P: Y ahora hablemos de fútbol ¿Cómo fue lo de Racing?
R: Soy un apasionado del fútbol y mi equipo de siempre es el Sporting Cristal de Perú (el mejor club peruano). Sin embargo en el en los 80’ en una Supercopa vi un vibrante partido de Racing y su hinchada me cautivó y también Rubén Paz y Fillol entre otros. Recuerdo que metió un gol Colombatti y el cilindro (el estadio de Racing) se vino abajo.
Así que siempre sigo a Racing en Argentina. Lo que es la vida: Guillermo Rivarola ex jugador y entrenador de Racing, hoy entrena (en el 2011) al Sporting. Otra anécdota, en la libertadores de 1997 Cristal y Racing jugaron y sufrí porque quería dos empates. Ambos golearon de local, aunque Cristal eliminó a Racing en Lima pese a que la academia tenía un equipo donde jugaba el mago Cappria. Cristal esa noche jugó como nunca antes lo hizo un equipo peruano en su historia. Puedes verlo en you tube
Y ya no hablo más de futbol porque si no jamás termina la entrevista (risas)

Hemil García Linares, autor de "Cuentos del Norte, Historias del Sur" Gracias!!!!!
Gracias a vos, che y mucho éxitos.

miércoles, 20 de abril de 2011

VETO A MARIO VARGAS LLOSA EN ARGENTINA POR PARTE DE INTELECTUALES


VETO A MARIO VARGAS LLOSA EN ARGENTINA POR PARTE DE INTELECTUALES
Sorprende que ciertos “intelectuales” argentinos pretendan negar el derecho legítimo de Mario Vargas Llosa de inaugurar la 37 Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, lo cual representa claramente un boicot. Este “veto” viene presidido nada más y nada menos que el mismísimo Director de la Biblioteca Nacional Argentina, señor Horacio González.
Don Horacio González argumenta que es “sumamente inoportuno” que MVLL “ocupe ese lugar para una feria que nunca dejó de ser un termómetro de la política.” Asimismo añade que MVLL no está acorde “con las corrientes de ideas que abriga la sociedad Argentina”.
¿A qué corrientes se refiere el señor González? ¿A la avenida?
¿A una corriente política llamada Kirchnerismo?
¿Puede determinar él, porque sí, lo que siente todo un pueblo y cada individuo?
¿Según González toda una nación se opone a que Mario Vargas Llosa inaugure la Feria?
Sólo mediante un censo nacional o una encuesta de gran envergadura se podrían corroborar las afiebradas apreciaciones de Horacio González, habría que hablar con estudiantes en las escuelas y universidades y preguntarles a ellos si no desean ver a Mario Vargas Llosa.
Las declaraciones de Horacio González son deplorables y producto de una posición política cochambrosa. Pareciera que por sus encomiables labores en la biblioteca hubiese olvidado que la libertad de expresión existe y por ello el autor peruano ha mostrado su opinión acerca de los gobiernos de Bolivia, Ecuador, Venezuela, y Argentina. Equivocado o no, MVLL está en su derecho de opinar, asimismo Horacio Hernández puede criticar a cualquier presidente sin que por ello tenga que ser vetado.
Realmente es desatinado pretender vetar a un escritor y un ser humano común; es casi inconcebible que en los tiempos modernos que vivimos exista esta tendencia anacrónica de censurar por no pensar ideológica y políticamente igual.
En todo caso, si el señor González se rige bajos esos parámetros, tendría también que eliminar todos los libros de liberalismo económico y capitalismo que están en los estantes de la prestigiosa Biblioteca Nacional de Argentina. Podrían quemarlos quizás en acto público al mejor estilo de la inquisición. Debería deshacerse de todos los libros que no estén acordes con su más hondo sentir político, filosófico, e intelectual. Y siguiendo con esa misma filosofía del absurdo tal vez podría desafiliar de la biblioteca a quienes no son del equipo de fútbol de sus amores. Y mejo aún, todo el que desea ser miembro de la Biblioteca debería mostrar su carnet de afiliado al Kirchnerismo
La actitud beligerante y profundamente política de González no condice con los preceptos democráticos de un país y más bien armoniza con la bravata y el totalitarismo.
Al respecto el periodista y escritor argentino Jorge Fernández ha dicho que “lo que sucede con Vargas Llosa demuestra que si Jorge Luis Borges estuviera vivo no podría tampoco inaugurar la Feria del Libro, porque Borges tenía la misma actitud crítica ante el peronismo y populismo”. Asimismo Fernández asegura que “su presencia (la de MVL) es un honor para la feria”.
El Director de la Biblioteca Nacional Argentina en su intento de veto tiene el apoyo de otros intelectuales cercanos al Kirchenerismo como José Pablo Fienmann, Aurelio Navaja y Vicente Batista.
¿Fuera del contexto argentino alguien conoce a estos señores? ¿Qué poder y aureola tiene ellos para decir quién puede presidir la inauguración?
Existe en Argentina un admirable patriotismo lo cual es saludable pero ser patriotero y populista es diferente.
González alega que MVLL no entona con las ideas de la sociedad argentina. Esta afirmación es ridícula e inconsistente pues presume que sociedad es un grupo minúsculo de personas de su entorno.
Esto veto es una idea equivocada pues parte de una posición política y sesgada. Tan equivocada que la misma Presidenta de Argentina, señora Cristina Fernández, ha exhortado al señor Horacio González que desista de su intención.
¿Podrían ejercer los peruanos y los millones de lectores de MVLL a un veto similar contra los intelectuales José Pablo Fienmann, Aurelio Navaja y Vicente Batista?
Es Probable pero lamentablemente estos intelectuales no son conocidos más allá de sus fronteras. Además, los principios éticos de la comunicación, las letras, y las artes siempre han sido libertarios por lo cual un veto a estos intelectuales no sería correcto ni posible. En todo el deseo de vetar a los opositores de MVLL no pasará de ser apenas un mal pensamiento o un pecadillo quizás.
Argentina es una gran nación con grandes literatos como Borges y Sábato y ante todo un país democrático que ya no necesita dictaduras, ni vetos.
Es quizás el ferviente deseo de muchos jóvenes lectores conocer en persona a Mario Vargas Llosa.
¿Por qué los estudiantes y amantes de la literatura deberían privarse de conocer a MVLL?
¿Debido al capricho del director de la Biblioteca Nacional y el de sus amigos?
El día que cientos de personas aplaudan al señor Mario Vargas Llosa en la Feria del Libro, entonces aquellos que se opusieron a que el escritor peruano la inaugure, sentirán las vergüenza de sus palabras confirmando que su propuesta partió más de una mezquindad y no de un supuesto nacionalismo; y sabrán que se han equivocado porque vox populi, vox Dei, y en estos temas el pueblo no se equivoca y es quien elige a sus héroes, mártires, y escritores más entrañables.
Dicen que la Argentina es más grande que sus problemas y que dios es argentino. Si estas dos premisas son ciertas, entonces Mario Vargas Llosa debería inaugurar la Feria sin ningún problema. Como anécdota quedará el hecho que dos o tres tontos útiles quisieron vetar a un autor escritor, que con las armas de un escritor, los ha vencido ampliamente.